Una odisea antes del partido de la Copa África
La Copa África 2025 se ha visto envuelta en una polémica de proporciones mayúsculas luego de que la selección de Nigeria, las Super Águilas, denunciara un trato inhumano por parte de las autoridades de Libia. El equipo nigeriano fue retenido durante más de 12 horas en un aeropuerto desierto, sin agua, comida ni comunicación, a tan solo horas de su crucial partido de clasificación. Este incidente ha generado una ola de reacciones tanto en el ámbito deportivo como político, y ha puesto en duda la realización del encuentro.
Nigeria retenida en un aeropuerto libio: ¿Problemas técnicos o una venganza encubierta?
El conflicto comenzó cuando la selección de Nigeria, que se encontraba en ruta hacia Bengasi para su enfrentamiento contra Libia por la fase de grupos de la Copa África 2025, fue desviada sin previo aviso hacia el aeropuerto de Al-Abraq. Lo que parecía ser un simple cambio logístico se transformó en una pesadilla para los jugadores y el cuerpo técnico. Según declaraciones de la Federación de Fútbol de Nigeria (NFF), los jugadores quedaron varados en el aeropuerto, sin acceso a las comodidades básicas, lo que llevó a que muchos de ellos durmieran en el suelo entre mochilas y sillas.
La situación no solo afectó el bienestar físico de los jugadores, sino también su moral. William Troost-Ekong, capitán de la selección nigeriana, fue uno de los primeros en manifestarse, asegurando que su equipo no jugaría el partido ante Libia debido a las condiciones inhumanas a las que habían sido sometidos. «Nos negamos a hacer el viaje de tres horas en autobús entre Al-Abraq y Benina. No podemos imaginar las condiciones en las que estaríamos si lo hiciéramos», afirmó en sus redes sociales.
El maltrato en el aeropuerto y la respuesta de la NFF
El incidente fue aún más grave debido a la falta de intervención por parte de las autoridades locales. Según Víctor Ikpeba, exjugador internacional nigeriano, la embajada de Nigeria no pudo intervenir, ya que requería la autorización del gobierno libio. «Nos encerraron en un aeropuerto abandonado como rehenes. Más de 12 horas sin comida ni bebida. Esto es un intento claro de desestabilización», denunció Ikpeba, quien acompañaba al equipo en el viaje.
Por su parte, la NFF no tardó en actuar. El organismo presentó una queja formal ante la Confederación Africana de Fútbol (CAF), exigiendo una investigación exhaustiva sobre el maltrato recibido. Además, solicitaron que se tomen medidas drásticas contra Libia, como su posible expulsión de las competiciones internacionales. «La seguridad de nuestros jugadores está en riesgo. Libia no está capacitada para albergar partidos en su territorio», comentó uno de los portavoces de la NFF.
¿Venganza por un incidente anterior?
Mientras la NFF acusa a Libia de juego sucio, medios locales del país norteafricano han señalado que el incidente podría ser una represalia por el trato recibido en Nigeria en un encuentro anterior. Según estos reportes, el equipo libio habría sufrido circunstancias similares durante su visita a Nigeria, lo que habría motivado la decisión del gobierno libio de desviar el vuelo nigeriano.
Sin embargo, la Federación de Fútbol de Libia ha negado rotundamente estas acusaciones. «Rechazamos cualquier insinuación de sabotaje o venganza. Este malentendido será resuelto de manera amistosa. Siempre hemos promovido la unidad y la deportividad en el fútbol», expresó el organismo en un comunicado oficial.
¿Se jugará el partido entre Nigeria y Libia?
Con el equipo nigeriano aún varado en Libia y sin una resolución clara, la realización del partido está en duda. El capitán Troost-Ekong fue claro en su postura: «No jugaremos este partido bajo estas circunstancias». Esta decisión plantea interrogantes sobre el futuro del encuentro. ¿Recibirá Libia los puntos del partido si Nigeria se niega a jugar? ¿Habrá sanciones para los locales por la imprudente decisión de desviar el vuelo?
Nigeria, que lidera el grupo D con 7 puntos en tres partidos, había vencido recientemente a Libia por 1-0 en su último encuentro en casa, lo que refuerza su posición en la clasificación. En contraste, Libia ocupa el último lugar del grupo con apenas un punto, lo que resalta las dificultades que ha enfrentado el equipo en esta fase de clasificación.
UPDATE:
Can I shock you?! the pilot has just told us there has been fuel at this airport for the plane all this time. They could have released it but haven’t given us permission since. Can you imagine?! So how long are they planning to hold us hostage here!!! Still just waiting
— William Troost-Ekong (M.O.N) (@WTroostEkong) October 14, 2024
Consecuencias para la Copa África 2025
El incidente ha generado un fuerte debate sobre la seguridad y las condiciones en las que se desarrollan los partidos de la Copa África 2025. La CAF, como ente rector del fútbol africano, tiene la responsabilidad de garantizar que todos los equipos compitan en igualdad de condiciones y que se respeten las normativas de seguridad. Si no se toman medidas contundentes, este tipo de situaciones podrían repetirse, afectando la integridad del torneo.
A la espera de un comunicado oficial por parte de la CAF, el destino del partido entre Nigeria y Libia sigue siendo incierto. Lo que es seguro es que este incidente ha dejado una marca imborrable en el camino hacia la clasificación para la Copa África 2025, y las repercusiones podrían ir mucho más allá de este encuentro.